Presentación del Año Jubilar del Santo Cáliz 2020-21 «Cáliz de la Pasión»
El cardenal Cañizares invita a que "Valencia sea lugar de hermandad para acoger a todos y curar heridas, hacer que la iglesia sea hospital de campaña"
El Arzobispo de Valencia, cardenal Antonio Cañizares, ha invitado a que «Valencia sea un lugar de hermandad para acoger a todos y curar heridas, con el espíritu samaritano del que habla el Papa Francisco en su última Encíclica ´Fratelli Tutti`, hacer que la Iglesia sea hospital de campaña». Así lo ha señalado en la presentación del Año Santo Jubilar, cuyo lema es «Santo Cáliz de la Pasión».
Además, ha sido anunciada la creación de una residencia para personas mayores con hijos con discapacidad, a iniciativa del cardenal Cañizares, un proyecto que se enmarca en la vertiente del Año Jubilar por la que se fomentarán las obras de misericordia.
El Arzobispo de Valencia ha señalado el ecumenismo de este Año Santo, que invita a todas las confesiones, y ha recordado su reciente encuentro con el actual Presidente de la Comisión Islámica de España, Ayman Adlbi , tras el fallecimiento de su predecesor, Riay Tatary, por Covid-19 el pasado mes de abril. «Él y yo nos llamábamos hermanos y seguimos el espíritu de hermandad y fraternidad que impregna este Año Jubilar en Valencia».
El Cardenal también ha incidido en que este Año Jubilar «debe servir para consolidar la fe, avivar en el pueblo cristiano el sentido del amor y del servicio», y ha pedido que Valencia sea «un centro de referencia y de peregrinación para toda la cristiandad, que cuando se piense en la Pasión se mire a Valencia» y también «un foco de atracción para venir a adorar, a entrar en el misterio de la Eucaristía».
Del mismo modo, el Arzobispo ha señalado que además del Santo Cáliz de la Última Cena, la Catedral es depositaria de dos reliquias muy importantes, como son la Vera Cruz y la Santa Espina, «y las unimos para expresar lo que es el Cáliz de la Pasión».
Además, «celebramos este Año en la etapa final del Sínodo Diocesano que supone una llamada a la revitalización de nuestra Iglesia para que evangelice y construya esa fraternidad de la que nos habla Francisco», ha añadido.
El Arzobispo Cañizares ha subrayado la importancia de la llamada «Ruta del Grial», Ruta del Santo Cáliz, desde el monasterio oscense de San Juan de la Peña hasta la Seo valentina, que recorre un total de 18 municipios por la Comunitat Valenciana, y que ha sido promovida por la Agència Valenciana de Turisme de la Generalitat y por el Gobierno de Aragón, «que ha de incrementar la colaboración con las instituciones. Mantendremos muy pronto reuniones con los presidentes de la Generalitat, la Diputación y el alcalde, Joan Ribó, y será un aliciente más y un servicio para todos».
Vicente Fontestad: «Tenemos entre nosotros la reliquia posiblemente más importante de la Cristiandad»
En la presentación, el Vicario General de la diócesis de Valencia, Vicente Fontestad, ha asegurado que «tenemos entre nosotros la reliquia posiblemente más importante de la Cristiandad, en la que nuestro Señor Jesucristo, realizó la Última Cena que todos los días los sacerdotes conmemoramos en la celebración de la Eucaristía».
Por tanto, éste es un año «en el que queremos que todos tomemos conciencia de la importancia de la Eucaristía, de su centralidad para las parroquias, para los cristianos y también para la adoración eucarística».
El 25 de octubre, día de la solemne Apertura del Año Jubilar, «será un día de alegría y gozo para Valencia, porque comenzamos este Año Jubilar, el segundo» y ha recordado que «son muy pocas las diócesis en el mundo que cada cierto tiempo tienen el privilegio de celebrarlo. Nosotros cada cinco años».
Precisamente, el Vicario General se ha referido a la carta en la que el cardenal Cañizares decía «Dios ha enriquecido a la diócesis de Valencia con muchos dones, uno, sin duda de los más preciosos, es el Santo Cáliz de la Última Cena del Señor».
Asimismo, Fontestad ha recordado cómo se puede obtener la indulgencia plenaria, con las tres condiciones: celebración del sacramento de la penitencia, la participación en la eucaristía y la visita al Santo Cáliz y a la Catedral de Valencia. «En nuestro caso, -con motivo de la pandemia- lo haremos de forma individual y esperamos que la situación mejore para poder hacerlo también en grupos».
No obstante, si alguna persona no puede salir de casa por razón de enfermedad, o edad, o cualquier situación que le impida, «también se puede obtener la indulgencia cumpliendo estas condiciones, pero de esta manera limitada, en su propia casa».
Aunque el referente espiritual es «el punto central de este Año Santo», también tendrá repercusiones de tipo turístico, por el turismo religioso, que influirá en sectores como el de hostelería, viajes o restauración.
Igualmente, otra de las finalidades de este Año es «dar a conocer los misterios y los milagros eucarísticos, y las parroquias que los tienen»: Silla – milagro de las Sagradas formas incorruptas desde 1907 -; Alboraia y Almàssera, con el «milagro dels peixets»; Moncada y el milagro de la Venerable Inés; Alcoi y el milagro del robo y hallazgo de las Sagradas formas en 1568; y Llutxent y el milagro de los Sagrados Corporales.
Estas parroquias «quieren participar de este año dando a conocer los milagros eucarísticos» y por ello, el Cardenal «concederá que sea Día Jubilar el de la fiesta de su milagro eucarístico en cada uno de estos pueblos».
«Vertiente social» de Año Santo Jubilar: atención a enfermos y familias con hijos con discapacidad
Respecto a la vertiente social, durante el Año Jubilar «las parroquias fomentarán al máximo la pastoral de la salud, la atención a los enfermos, a los que están en casa solos, a los que sufren el virus, que por nuestra parte tengan las necesidades espirituales y materiales cubiertas, que las Cáritas parroquiales hagan todo lo posible para ello» y que esas personas «puedan tener al lado a un cristiano que le ayude y formar equipos de pastoral que atiendan a los enfermos donde no existan».
Por ello, según Fontestad, es un Año «que tiene que ser una oportunidad para cambiar de vida, para dejarnos tocar el corazón. De esto se trata, la gracia de Dios se va a derramar abundantemente, que no quede perdida y que sepamos acogerla», ha dicho.
Asimismo, ha anunciado un «proyecto importante», solicitado por el Cardenal: un centro asistencial para mayores con hijos con discapacidad, en la localidad valenciana de Torrent, «para que esa preocupación que los padres pueden tener cuando ellos ya no estén sea resuelta y puedan vivir sus últimos años con tranquilidad». Será un lugar para acogerles y darles atención «en un proyecto de gran envergadura, que está iniciado y que tenemos la firme voluntad de que un día pueda ser real su apertura», ha asegurado.
Álvaro Almenar: «La Catedral tiene que ser lugar de acogida de peregrinos que fomente el turismo, la cultura y, sobre todo, la fe»
En la presentación del Año Jubilar ha intervenido, igualmente, Álvaro Almenar, canónigo Celador del Santo Cáliz de la Catedral de Valencia, que ha expresado que «este Año Santo es un proyecto ambicioso que, poco a poco, iremos avanzando y que cada cinco años tendremos la oportunidad de celebrarlo».
Así, ha recordado que el Año Jubilar ya tuvo lugar en la diócesis de Valencia en 2015, «con mucho vigor», bajo el lema «Cáliz de la Misericordia», gracias al privilegio concedido por la Santa Sede que permite su celebración cada cinco años.
En 2015 «muchos colegios, parroquias, entidades y comunidades participaron y acudieron a la Catedral y a los lugares jubilares para obtener las indulgencias», según Almenar, que ha indicado que este año, por la pandemia y las medidas sanitarias, las peregrinaciones serán, de momento, a nivel individual y no grupales.
No obstante, a pesar las dificultades que puedan derivarse de la pandemia, «tenemos todo un año por delante para poder acoger a peregrinos. Nuestra diócesis de Valencia tiene un privilegio y una responsabilidad que el Señor nos ha dado: la reliquia del Santo Cáliz que custodia la Catedral desde el siglo XV».
Asimismo, el canónigo Celador del Santo Cáliz ha elogiado la colaboración que cuenta este proyecto «de tantas entidades e instituciones» y ha animado a que Valencia siga trabajando por este camino «para que nuestra Catedral sea lugar de acogida de tantas peregrinaciones».
«A día de hoy ya vienen muchos peregrinos para visitar y venerar el Santo Cáliz», ha afirmado. Por ello, «la Catedral de Valencia tiene que ser lugar de acogida y de puertas abiertas que fomente el turismo, la cultura, que esté en diálogo permanente y, sobre todo, que cuide y defienda la fe».
Las reliquias de la Pasión de Jesucristo de la Catedral, expuestas para todos los peregrinos
De igual forma, Álvaro Almenar se ha referido a otras dos «preciadas reliquias» veneradas también en la Catedral: la Santa Espina, que llegó a la Catedral de Valencia en el siglo XIII regalada por el Rey San Luis de Francia, y el Lignum Crucis o la Vera Cruz, un trozo de la Cruz de Cristo -uno de los más grandes que se conservan- que el papa Benedicto XIII regaló a Martín el Humano, que «estarán permanentemente expuestas en la Capilla de San Pedro de la Seo».
El relicario de la Catedral «es un verdadero tesoro que refleja la vivencia de la fe» y por eso «hemos querido subtitular el Año Santo como Cáliz de la Pasión« puesto que la Seo «tiene estas tres grandes reliquias que nos hablan de la Pasión del Señor». Así, «contemplando estas reliquias estamos invitados a unirnos a la Pasión del Señor».
Congresos, exposiciones y un Simposio, entre otros actos previstos
Igualmente, entre otros actos, actividades e iniciativas con motivo del Año Santo, se organizarán dos exposiciones, una la próxima Navidad con «pequeñas escenas que explicarán visualmente y de forma muy catequética lo que fue la Pasión del Señor» y otra exposición, con reproducciones de utensilios que se emplearon en la Pasión del Señor, como la lanza, la corona de espinas, «para entender como físicamente el Señor entregó su vida por nosotros».
También está previsto un congreso técnico sobre últimas investigaciones sobre el Santo Cáliz y un Simposio Teológico sobre el sentido del sufrimiento en la perspectiva cristiana, con la Facultad de Teología y las diferentes universidades. Además, está pendiente la reedición de la Revista de la Catedral y suplementos especiales en los medios de comunicación del Arzobispado.
Misas del peregrino para obtener la indulgencia
En cuanto a las misas del peregrino para obtener la indulgencia, se celebrarán los domingos a las 12 horas en la Catedral, presididas por el cardenal Cañizares «si la agenda lo permite», y los jueves, a las 20 horas, cuando se celebra la misa del Santo Cáliz, trasladada ahora al altar mayor para garantizar la distancia de seguridad.
Por último, ha sido proyectado el vídeo oficial del Año Santo Jubilar y ha sido presentada la página web oficial del evento, santocalizvalencia.org, además del cartel y logotipo que han sido diseñados.
© Catedral de Valencia / Crédito fotográfico: Alberto Sáiz