La Catedral comienza las catas desde la cubierta exterior para analizar el origen de las afecciones de los “ángeles músicos”
Realizadas por arqueólogos
El equipo multidisciplinar de especialistas que está estudiando el origen de las afecciones de los frescos renacentistas de los ángeles músicos de la bóveda de la Catedral de Valencia ha empezado ya las catas desde la cubierta exterior de la Seo con el fin de analizar los materiales que fueron empleados para su construcción y su estado de conservación.
De esta manera, ha comenzado una nueva fase “muy importante” para el estudio de las posibles afecciones de las pinturas porque en ella se podrá evaluar si hay humedades y de qué manera están afectando a los frescos, según explica el arquitecto de la Seo y coordinador de los trabajos, Salvador Vila Ferrer.
De momento, de las catas realizadas desde la cubierta exterior – iniciadas este martes- se está observando que las plementerías de la bóveda están rellenas “con materiales muy macizos, a base de argamasa de mortero de cal y cantos rodados” que hacen más difícil su perforación. No obstante, el equipo calcula poder terminar esta fase de catas desde el exterior en dos semanas y empezar a ver conclusiones el próximo mes de noviembre.
Estos trabajos, llevados concretamente por arqueólogos, se están desarrollando desde los andamios que fueron instalados en la parte exterior del ábside, sobre los que se colocó una sobrecubierta metálica provisional, de chapa y vigas metálicas, que ocupa un espacio aproximado de 200 metros cuadrados de superficie y funciona como techo, para que no pueda entrar agua en la bóveda en el caso de lluvias.
Igualmente, “estamos estudiando cómo afecta la porosidad de la piedra de la fachada a las pinturas y las sales que pueden estar metidas dentro de las plementerías, en la que podría haber incluso rellenos de cerámica como era habitual en toda la Corona de Aragón en el siglo XIII”, explica el arquitecto.
Mientras tanto, los trabajos desde el interior de la bóveda siguen su curso, con la recogida de muestras de sales, para determinar “qué tipo de afloración salina hay en las pinturas, en qué zonas y en qué cantidad”.
Con todas las conclusiones del estudio, se realizará una propuesta de intervención, un proyecto que tendrá que ser valorado y aprobado por la Conselleria de Cultura.
Así, según explica el arquitecto de la Catedral, Salvador Vila, “hemos tomado ya muchas muestras y hemos hecho algunos análisis ‘in situ’”. Ahora, “estamos a la espera de que el laboratorio nos dé resultados para ir sacando conclusiones y, posteriormente, hacer un proyecto de restauración de todo el conjunto”.
Los frescos de los ángeles músicos son pinturas de la segunda mitad del siglo XV realizadas por los artistas italianos Francesco Pagano y Paolo de San Leocadio en la primera bóveda gótica de la Catedral y fueron hallados el 22 de junio de 2004 durante las obras de restauración del altar mayor de la Seo, después de permanecer más de 300 años ocultos tras la bóveda barroca que fue retirada.
© Catedral de Valencia / Crédito fotográfico: V. Gutiérrez / AVAN