Una procesión eucarística con la Custodia de la Catedral culminó la Vigilia Nacional de la Adoración Nocturna
Encabezada por el Arzobispo y con un millar de adoradores valencianos y del resto de España, recorrieron las calles de la ciudad
Con una solemne procesión eucarística por las calles del centro de Valencia con el Santísimo en la monumental Custodia de la Catedral valentina, mientras volteaban las campanas de la torre del Miguelete, concluyó anoche la Vigilia Nacional de la Adoración Nocturna Española (ANE) y la Adoración Nocturna Femenina Española (ANFE).
Tras el rezo en la Catedral, llena de adoradores, del Santo Rosario y la celebración de la eucaristía presidida por el cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, dio comienzo la procesión eucarística por las calles del entorno de la Seo, en la que la Custodia fue llevada por diáconos y sacerdotes.
La solemne procesión, precedida de las banderas de las diferentes secciones participantes de ANE y ANFE, salió de la Catedral por la puerta románica a los acordes del himno nacional, interpretado por una banda de música entre la ovación de todos los participantes, cerca de un millar de adoradores de Valencia y del resto de España.
El recorrido procesional del Santísimo fue continuamente acompañado por himnos eucarísticos.
Era la primera vez en 49 años que la Custodia de la Catedral salía en procesión con el Santísimo sin ser fiesta del Corpus Christi, algo que no sucedía desde el Congreso Eucarístico Nacional de 1972 en Valencia.
Tras recorrer la plaza de la Virgen, la calle de L´Almodí y llegar a la parroquia de San Esteban, cuyas campanas también recibieron el paso del Santísimo con un volteo general, la procesión siguió por la calle de los Venerables hasta la plaza del Obispo y la Plaza de L´Almoina, volviendo a entrar por la puerta románica de la Catedral, a los sones del himno nacional.
Finalmente, ya en el interior de nuevo, el cardenal Cañizares bendijo a todos con el Santísimo concluyendo así la Vigilia Nacional de ANE y ANFE.
© Catedral de Valencia / Crédito fotográfico: Mª Jesús Fernández